Esta tarde entrevistamos a Francisco Hurtado de Amézaga, director general técnico y de producción de Bodegas Herederos del Marqués de Riscal.
Empieza comentándonos que su tatarabuelo fue el fundador de Marqués de Riscal y que comienza su andadura vitivinícola haya por los años 70 años, donde estudia enología en Burdeos y como después le encargaron de encontrar una zona en España donde se pudiera hacer vino blanco a la altura y prestigio de la bodega.
Nos habla que en aquella época en España no había consumo de vino blanco, ni tampoco gastronomía para estos y por supuesto no existían las grandes zonas de vinos blancos, como Galicia, con sus ribeiros y albariños.
Después de buscar mucho en diferentes zonas productoras, nos dice que encontró la zona de Rueda, que cuando ellos llegaron a ella el viñedo se estaba arrancando y a partir de aquí empezó la andadura de Rueda, no sin pocas críticas por haberse ido de Rioja a buscar otras zonas para hacer vinos blancos.
Explica que adquiriendo las uvas a los viticultores de los viñedos viejos con poco rendimiento, dan unas uvas fantásticas y no había ningún problema en hacer buen vinos con estas uvas.
Le preguntamos qué opina de los verdejos que se están elaborando en estos momentos en la DO Rueda, y nos dice que el que tiene buenas viñas plantadas en buen terreno y lo hace bien, pues elabora muy buen vino. En otras zonas con terrenos terciarios y arenales donde nunca se había plantado viña, no es lo mismo, pero la gente tiene todo el derecho del mundo a meter la pata.
Para aclararnos esto comenta que Rueda está situada en el Valle del Duero, en el cual hay hasta ocho terrazas diferentes que llegan hasta Segovia, es decir llegan a 100 km del Duero y los grandes verdejos están plantados en ellas, teniendo las terrazas más jóvenes cerca de Rueda y las más viejas en la zona de Segovia, como son Nieva, Aldeanueva, Aldegüela y Moraleja, con terrenos cascajosos, muy arenosos y con la arcilla en el subsuelo, esos son los que dan mejor calidad.
Para terminar nos explica cómo fue la cata de vinos histórica, en la Bodega Marqués de Riscal en El Ciego, situada en la Rioja Alavesa, que se realizó hace unos meses, nos cuenta que Riscal siempre ha tenido una filosofía de crianza prolongada de vinos, es decir de hacer vinos que aguantaran muchos años, empezaron con un primer vino embotellado en 1862, que fue la primera botella que se llenó de vino en Rioja y se tapó, del cual solo quedan 22 botellas en la bodega y acabando con un 2012, es decir 110 añadas, que tuvieron el privilegio de catar 16 expertos nacionales e internacionales, durante dos días,
Nos comenta que no hay ninguna bodega en el mundo que pueda hacer esta cata pues nadie tiene ese capital de botellas y ellos las tienen porque tradicionalmente en Riscal se han guardado botellas de todos los años que se ha producido.
En esta cata tan especial se pudieron ver la evolución de los vinos a lo largo del tiempo pudiéndose catar vinos prefiloxéricos del siglo XIX y los posteriores después de la filoxera, e hicieron falta 20 años para que volviera a recuperarse la calidad, a partir de los años 30, 40, 50…
Francisco Hurtado de Amézaga, nos cuenta muchas más cosas muy interesantes, que espero que no os perdáis en esta entrevista.